La región del Gran Chaco está fuertemente sometida a los riesgos climáticos por lo que el proyecto se propuso sensibilizar a actores sociales y productivos, así como fortalecer las capacidades de los diferentes equipos. Por la permanencia y trayectoria de actores diversos en esta área, persiste una fragmentación de las visiones territoriales. Ante este escenario, el proyecto planteó la necesidad de apuntalar el desarrollo de una visión de futuro compartida, que favorecería generar sinergias, fortalecer las redes existentes y darles un sentido integrador a las acciones climáticas de los países involucrados.
Las actividades importantes de esta solución son informar, capacitar y escalar a nivel regional. Entre octubre 2020 y abril 2021 se realizaron 5 sesiones virtuales sobre gobernanza territorial, 3 sesiones específicamente orientadas al trabajo en equipo, seminario teóricos-metodológicos y talleres prácticos. La solución tuvo un alcance a nivel de región (Gran Chaco Americano), con mayor énfasis en los territorios provinciales/departamentales de las Áreas Piloto (AP) en las que se desarrolla el proyecto como Salta y Córdoba en Argentina, Tarija en Bolivia y Región Occidental en Paraguay.
Lo innovador es el alcance regional de este proceso que abarca tres países y permite construir una visión de futuro colectiva a pesar de la complejidad y la tensión sobre el uso de los recursos naturales. Con esta práctica se logró capacitar a los equipos técnicos y a las y los referentes de las entidades para apoyar en las acciones climáticas. Además, la población beneficia de la información compartida y las acciones derivadas. El ciclo de seminarios y capacitaciones sensibiliza a diversos actores en materia de prospectiva para trabajar y fortalecer la gobernanza climática de la región. Para garantizar equidad de género, se tomó especial cuidado durante el diseño de los seminarios en trabajar para asegurar la participación de mujeres como expositoras y participantes.
La realización virtual de las actividades por la pandemia mostró la importancia de conectividad e infraestructura que tiene que ser garantizada para que todas y todos puedan participar. La ventaja de las actividades virtuales es la facilidad de difundir y compartirlas. La solución es completamente replicable en otras regiones, pero es importante que los seminarios sean preparados con los equipos técnicos de cada proyecto o región, de modo de lograr una solución adaptada a cada contexto.
Este proyecto y sus actividades fueron apoyados por el programa EUROCLIMA+, Expertise France (EF) y Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH.